jueves, 19 de julio de 2012

La imagen oculta


Edipo frente a la esfinge. La respuesta más sencilla es casi siempre la más difícil de adivinar, de ahí la sorpresa del animal mitológico. Tal vez no sea mala opción, después de todo, volver a comprender los mitos para tratar de colmar las lagunas de la filosofía, disciplina del no-saber ejercida por los mayores soberbios de la historia. Vivimos en la trampas que nosotros mismos hemos elegido: el poder, el conocimiento, la imagen, la soledad. Para comprender por que no podemos salir de un laberinto sin llegar a otro, la razón no es una buena aliada en último extremo. Por eso el mito es importante, porque se sirve de la ficción y de la fantasía para explicarnos de forma bella los misterios de la vida que se escapan a la ciencia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario